Los minoristas se enfrentan a una nueva era digital a medida que las fuerzas de las redes sociales, las compras omnicanal y una ola de tecnologías de pago emergentes están transformando la industria.

Frente a este panorama minorista digital en rápida evolución, los minoristas se encuentran a sí mismos como objetivos mal defendidos de ataques cibernéticos cada vez más sofisticados.

También hay problemas de cumplimiento minorista con los que lidiar. La mayoría de los minoristas están sujetos al Estándar de seguridad de datos de la industria de tarjetas de pago (PCI DSS) y muchos también deben cumplir con la Ley de responsabilidad y portabilidad de seguros médicos (HIPAA).

Las conexiones de terceros son una gran preocupación para los minoristas. A menudo, es más fácil piratear las empresas con las que los minoristas hacen negocios y utilizar su acceso a la red para irrumpir en las redes de los minoristas.

Cumplir con los requisitos del Estándar de seguridad de datos de la industria de tarjetas de pago (PCI DSS) puede parecer difícil y costoso, pero cuando sabe exactamente lo que está haciendo, puede proteger su red y cumplir fácilmente los estándares de cumplimiento de PCI. Elija entre una variedad de soluciones que lo ayudarán a cumplir y lograr el cumplimiento.

La seguridad informática minorista a menudo ha sido reactiva y ha recibido financiación insuficiente; sin embargo, las brechas en la seguridad se están convirtiendo en un tema crítico. Desde una perspectiva tecnológica, los minoristas históricamente han adoptado un enfoque de casilla de verificación para el cumplimiento de PCI. La seguridad impulsada por el cumplimiento ha dado como resultado una protección de datos incompleta y soluciones puntuales mal integradas distribuidas en una amplia área geográfica. Además, la seguridad de los puntos finales a menudo se descuida en los sistemas de punto de venta debido a los desafíos en la implementación, el mantenimiento y la capacitación. Con personal limitado y prioridades conflictivas, los minoristas enfrentan el desafío de combatir las amenazas a la seguridad. En principio, la responsabilidad de la seguridad de TI no se puede delegar, pero muchos minoristas aún delegan actividades de seguridad clave en auditores, contratistas y tiendas. Por último, muchos minoristas carecen de un proceso de gobernanza y, en cambio, se centran en el cumplimiento normativo a expensas de un marco que rige la información.